En las imágenes de un vídeo publicado se ve camiones cisterna pertenecientes a la llamada coalición anti-Daesh que transportaban crudo desde el cruce fronterizo de Al-Walid hacia sus bases militares en el norte de Irak.
El oro negro de Siria la ha convertido en un lugar atractivo para varios países, entre ellos Estados Unidos y sus aliados. De tal manera que el crudo podría ser el factor más importante del comienzo y la prolongación de la crisis en este país, que desde 2011 enfrenta un conflicto armado provocado por grupos armados y organizaciones terroristas.
En este mismo contexto, el viceministro de Petróleo de Siria, Abdulá Jattab, denunció en diciembre pasado que Estados Unidos y milicias kurdas que patrocina roban el 80 % del petróleo del país árabe.
De hecho, el Gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad, ha denunciado en distintas ocasiones el saqueo de su petróleo por Washington, subrayando que los territorios y los recursos naturales del país pertenecen a los sirios, y Damasco, por lo tanto, debe controlarlos, y expulsar a los invasores.
Fuente: SANA