El presidente de Rusia dijo al primer ministro del Reino Unido que la expansión de actividades de la OTAN en Ucrania amenaza la seguridad nacional de su país.
El mandatario ruso, Vladimir Putin, en una conversación telefónica sostenida el lunes con el primer ministro británico, Boris Johnson, puso de relieve que los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) están amenazando a Rusia al expandir las actividades en Ucrania.
“Vladimir Putin proporcionó un resumen detallado de su evaluación principal de la situación actual en Ucrania. Se subraya que todo esto está sucediendo en el contexto de una ‘expansión’ militar activa en el territorio de Ucrania por parte de los países de la OTAN, lo que crea una amenaza directa a la seguridad de Rusia”, informó el Kremlin sobre la llamada de Putin a Johnson.
A su vez, el primer ministro británico reiteró el compromiso de Londres con la integridad territorial y la soberanía de Ucrania, y “advirtió que cualquier acción desestabilizadora sería un error estratégico que tendría consecuencias significativas”, conforme el 10 de Downing Street (la residencia oficial del primer ministro británico).
Añadió que Johnson expresó la profunda preocupación del Reino Unido por la acumulación de fuerzas rusas en la frontera de Ucrania; no obstante, destacó la importancia de trabajar a través de canales diplomáticos para reducir las tensiones e identificar soluciones duraderas.
¿Provocarán las tensiones una guerra de OTAN con Rusia?
Esta conversación tiene lugar mientras la tensión se cuece a fuego lento entre Rusia y Ucrania, con advertencias, amenazas y acumulación de fuerzas en las fronteras de ambos lados.
Según la inteligencia de EE. UU., Rusia ha estacionado alrededor de 70 000 soldados cerca de la frontera de Ucrania y ha comenzado a planificar una posible invasión tan pronto como antes del próximo año.
Por su parte, Moscú ha negado que se esté preparando para una invasión y ha acusado al Gobierno de Kiev de avivar las tensiones en la región mediante el despliegue de nuevas armas. Además, defiende que el traslado de fuerzas en su territorio fronterizo está relacionado con la necesidad de defensa y disuasión ante la amenaza de un posible ataque por parte de Ucrania, con la ayuda de la OTAN.
Las tensiones entre Kiev y Moscú se remontan a 2014, a raíz de la anexión de la estratégica península de Crimea a Rusia, como fruto de un referéndum en el que más del 96 % de sus habitantes votó a favor de dejar de ser parte de Ucrania para adherirse a la Federación Rusa.
Fuente: Hispantv