En este mes, las organizaciones musulmanas piden más que nunca al gobierno británico que adopte una nueva definición de odio contra los musulmanes para luchar mejor contra este fenómeno.
Esta campaña, que se lleva a cabo todos los años en noviembre, ha sido llevada a cabo desde 2012 por varias organizaciones musulmanas británicas, incluida MEND (Muslim Engagement and Development), con el objetivo de "luchar contra los estereotipos sobre el Islam y los musulmanes" que son el blanco crímenes de odio.
Los musulmanes fueron el blanco de casi la mitad de los delitos de odio motivados por la intolerancia religiosa, según el Ministerio del Interior del Reino Unido, que publicó las últimas estadísticas oficiales en octubre.
Los servicios policiales en Inglaterra y Escocia registraron 124.091 delitos de odio hasta marzo de 2021, un 9% más en un año. Según el Ministerio del Interior, "el aumento en el número de delitos de odio registrados por la policía en los últimos años se debe a los avances en el registro de delitos y una mejor identificación de lo que constituye un delito de odio".
Tres cuartas partes de estos delitos (85.268) son delitos contra la raza o la etnia, con un aumento entre marzo de 2020 y marzo de 2021 del 12%. Mientras tanto, los delitos de odio dirigidos a la religión cayeron un 18%, lo que representa 5.627 de los delitos de odio denunciados. Los musulmanes son el grupo religioso más afectado con 2.703 actos registrados (45%), seguidos por los judíos con 1.300 delitos registrados contra ellos (22%). Datos que preocupan a las organizaciones antirracistas, especialmente musulmanas, siempre decididas a movilizar a las autoridades públicas para luchar mejor contra la islamofobia.