«Como no pueden desaparecer personas, utilizan el lawfare (guerra judicial) para matarte», resaltó en una larga entrevista radial con AM750 el exgobernante, quien llegó la víspera a esta capital y estará presente junto al presidente argentino, Alberto Fernández, y el exmandatario boliviano Evo Morales en la puesta en circulación del libro Operación Rescate.

En diálogo con el programa La García, Correa resaltó que la arremetida contra presidentes y expresidentes en el continente es una nueva versión del Plan Cóndor y tiene dos patas: el eje mediático, que trata de destruir, de generar consenso; y el judicial, en el cual jueces temerosos o abiertamente corruptos, copian los titulares de la prensa.

Durante su charla, el exmandatario ecuatoriano apuntó contra los medios hegemónicos al señalar que hoy no puede existir el lawfare sin esos medios.

«Es como la artillería en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), destrozan todo, eliminan cualquier resistencia, los jueces cuentan incluso con los aplausos de la gente más noble, que cree que está apoyando algo correcto cuando es una gran canallada», dijo.

Correa calificó a la prensa hegemónica como manipuladora y «perros guardianes de las élites» y enfatizó que para que haya democracia tiene que haber información, elecciones libres.

En otro momento de su charla, expresó que no puede ir a su país por la persecución que vive, la cual calificó de ridícula, y denunció que en su país hace cinco años está fuera del Estado de derecho.

Al ahondar sobre la situación en Argentina, el también economista consideró que Alberto Fernández se enfrentó a un país sobreendeudado junto con la Covid-19 y eso siempre tiene un costo político, por más que tengas un presidente brillante. «Buscas culpables, más aun con la manipulación de la prensa. Eso explica un poco el resultado de las primarias pese a que Argentina es uno de los países que más se esta recuperando pese a que no va a tener los niveles prepandemia. Básicamente es el problema de la deuda del Fondo Monetario Internacional», acotó.

En ese sentido, señaló que el expresidente Mauricio Macri -responsable de tomar en préstamo más de 44 mil millones de dólares del FMI-, gozó de esa deuda en vez de reactivar el país. Algo similar pasó en Ecuador, por un lado entraba la plata de deuda, por otro salía por la fuga de capitales, manifestó.

Fuente: Prensa Latina