En el aniversario del Día Mundial del Hábitat, el Centro de Investigaciones de la Tierra de la Casa de Oriente en Jerusalén ocupada elaboró un estudio, en el que se refirió al número de viviendas que la ocupación ha derribado desde su control militar de los territorios palestinos en 1948 y 1967, donde el la ocupación israelí demolió alrededor de 172.900 hogares palestinos, desplazó a un total de 1.324.000 ciudadanos palestinos (hoy son los seis millones de refugiados) y confiscó alrededor de 1,9 millones de hectáreas, (más del 70% de la superficie total) de tierras históricas de Palestina.

El Centro de Investigaciones de la Tierra agregó en su informe que "El mundo celebra el Día Mundial del Hábitat a la luz del aumento constante de las voces de los defensores de este derecho humano básico. ¿Soñará el mundo con un día en el que todos los ciudadanos tengamos un hogar apropiado y donde la dignidad humana se logra y siente el calor de la vida?"

"El pueblo palestino sueña con esto para sí mismo y para el resto de los oprimidos y privados de los pueblos de la tierra para esperar una posición global seria que ponga fin a las violaciones sistemáticas de la ocupación israelí, que derriba las viviendas de los palestinos, incluso instalaciones móviles, caravanas y cuevas excavadas bajo las rocas son demolidas, cuyo único objetivo es desplazar a los palestinos de sus tierras y poner a disposición de los colonos judíos estas tierras palestinas usurpadas, aplicando la política de la imposición de hechos consumados que frustrarían cualquier posible solución política”.

El informe detalla como la ocupación ha demolido un total de 172.900 hogares palestinos, desplazó a un total de 1.324.000 ciudadanos palestinos (hoy, ellos y sus descendientes suman más 6 millones de refugiados) y como confiscó alrededor de 19 millones de dunums de tierras históricas de Palestina. Todo esto con el fin de traer y asentar a más de 5 millones de inmigrantes judíos-sionistas extranjeros provenientes de todos los rincones de la tierra, reemplazando a los palestinos expulsados, propietarios legítimos e históricos de esas tierras.

El estudio indicó que, en el año de la Nakba, la guerra de 1948, la ocupación israelí demolió alrededor de 125.000 hogares palestinos y desplazó a unos 800.000 palestinos, que constituían aproximadamente el 47% del total de palestinos en ese momento y el 80% de la población palestina en los territorios ocupados en 1948.

Durante la guerra de 1967, en la que el estado de ocupación israelí invadió el resto de la Palestina histórica (Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, y la Franja de Gaza), durante esa guerra, se demolieron 5.500 viviendas y se desplazaron alrededor de 200.000 residentes, y la política israelí de demolición de viviendas continuó en Cisjordania, particularmente en Jerusalén Oriental.

Durante el período comprendido entre 1967 y fines de septiembre de 2021, las topadoras de la ocupación demolieron unas 11.900 viviendas palestinas, incluidas 7.440 viviendas en Jerusalén oriental, desplazando a unos 73.000 ciudadanos, incluidos 47.220 habitantes de Jerusalén ocupada. Durante el mismo período, las topadoras y aviones de guerra de la ocupación demolieron alrededor de 21.000 viviendas desplazando a unos 189.000 ciudadanos palestinos en la Franja de Gaza, un desplazamiento interno que llevó a muchos a emigrar fuera del país.

A la luz de la epidemia del coronavirus, que aumentó su impacto en Palestina a la luz de la segunda y tercera oleadas, y a pesar de la emergencia sanitaria, la ocupación continuó con su política su limpieza étnica, llevando a cabo la demolición de unas 607 viviendas en Cisjordania y Jerusalén Oriental, durante el período pandémico de 2020 a septiembre de 2021, mientras que, en la Franja de Gaza, los bombardeos israelíes demolieron por completo más de 2.000 viviendas que albergaban a unos 9.000 habitantes de Gaza.

La escandalosa ilegalidad israelí se manifestó en los intentos de la ocupación de deportar a los palestinos propietarios de viviendas en el barrio de Sheikh Jarrah, con falsa documentación aceptados por los tribunales israelíes, incluso los llamados “Tribunales Superiores de Justicia”.

Referente al Día Mundial del Hábitat, en 1985 las Naciones Unidas designó el primer lunes de octubre de cada año como el Día Mundial del Hábitat con el objetivo de reflexionar sobre el estado de la estructura de nuestros pueblos y ciudades y el derecho básico de todos a una vivienda adecuada. También pretende recordar al mundo su responsabilidad colectiva en el futuro del hábitat humano.

Fuente: Corresponsal de PalestinaLibre.org en Jerusalén ocupada