Más de la mitad de los clientes jóvenes musulmanes usarían la banca islámica si fuera más accesible, según un informe de la plataforma bancaria Mambu.
El informe “Fe y finanzas: la cara cambiante de la banca islámica”, que encuestó a más de 2.000 jóvenes musulmanes en todo el mundo, ilustra el creciente atractivo de los servicios financieros islámicos y señaló que más de la mitad (53%) de los jóvenes musulmanes elegirían la banca islámica si tuvieran acceso a ella
Esto refleja una demanda más amplia de servicios bancarios éticos a raíz de la COVID-19, ya que los consumidores buscan tomar decisiones más sostenibles y socialmente conscientes después de la pandemia.
Se encuestó a un total de 251 encuestados de Emiratos Árabes Unidos y 254 de Egipto, de un total de 2.016 encuestados en todo el mundo. El 47% de los encuestados de los Emiratos Árabes Unidos y el 18% de Egipto dijeron que actualmente utilizan ya la banca islámica. El 16% de los encuestados de los Emiratos Árabes Unidos dijo que usa la banca tradicional pero está considerando utilizar la banca islámica, mientras que esta cifra fue más alta en Egipto con un 24%. El 15% en los Emiratos Árabes Unidos y el 18% en Egipto dijeron que utilizan una combinación de banca tradicional e islámica.
Según la investigación de Mambu, el 74% de los jóvenes musulmanes en todo el mundo dijeron que quieren que los bancos realicen inversiones que se alineen con sus creencias religiosas, mientras que el 75% quiere que hagan inversiones que “hagan el bien en el mundo”. Más específicamente, casi dos tercios (62%) se oponían a que su dinero sea empleado en préstamos bancarios a las empresas tabacaleras, y el 69% preferiría que sus bancos no prestaran a compañías de juegos de azar.
Elliott Limb, director de atención al cliente de Mambu, dijo: “Los consumidores más jóvenes exigen un cambio financiero y el mercado financiero islámico no es una excepción. Nuestra investigación ilustra cómo las tendencias bancarias islámicas reflejan la demanda que estamos viendo de prácticas bancarias éticas de manera más amplia. Con 1.900 millones de musulmanes desatendidos en todo el mundo, está claro que existe una gran oportunidad para que tanto los bancos islámicos como los convencionales proporcionen soluciones compatibles con las creencias del consumidor moderno”.
El mercado financiero islámico está creciendo rápidamente. Los activos totales en el sector han superado los 2 billones de dólares en los últimos años y se espera que alcancen los 3,8 billones de dólares en 2023. Pero la falta de servicios digitales podría ser una barrera importante para la aceptación del servicio entre la próxima generación de consumidores.
Según la investigación de Mambu, el 76% de los jóvenes musulmanes dijeron que la disponibilidad de opciones bancarias en línea es un factor decisivo. Específicamente, el 74% dijo que es importante poder acceder a los servicios de su banco a través de una aplicación móvil y el 80% dijo que deseaban acceder a los servicios bancarios en cualquier lugar y en cualquier momento.