Según la agencia palestina de prensa Wafa, las fuerzas de ocupación obligaron al ciudadano, Muhammad Nassar Al-Husseini, a demoler su casa en Wadi Qaddoum, en la localidad de Silwan, y si no cumplía la decisión la demolerían ellos mismos y pagaría los costos de la demolición.
Las autoridades de ocupación israelíes obligaron, en la madrugada de este martes, a un ciudadano palestino a demoler su casa en la ciudad ocupada de Jerusalén, con el pretexto de que no tenía permiso de construcción.
Según la agencia palestina de prensa Wafa, las fuerzas de ocupación obligaron al ciudadano, Muhammad Nassar Al-Husseini, a demoler su casa en Wadi Qaddoum, en la localidad de Silwan, y si no cumplía la decisión la demolerían ellos mismos y pagaría los costos de la demolición.
En respuesta a la demolición de su casa, Al-Husseini dijo: "Mi familia consta de ocho miembros. Mi corazón se rompe, dormiré en el auto, gracias a Dios, que Dios ayude a todas las personas".
Además, la ocupación obligó a ocho familias de Jerusalén a demoler sus casas ellos mismos, pero estos se negaron. Las fuerzas israelíes la demolieron y las familias pagarán entonces por los costos de demolición, que se estiman en 200 mil shekels.
El municipio de ocupación sigue distribuyendo decenas de notificaciones a las familias de Jerusalén, específicamente en el barrio de Silwan, con un plazo de 48 horas para demoler sus viviendas, con el pretexto de construir sin permiso.
"La escalada de la política de demolición de viviendas, instituciones comerciales y establecimientos es una política agresiva, cuyo objetivo es seguir presionando a los jerosolimitanos hasta llegar a desplazarlos y deportaros de Jerusalén", dijo el portavoz de los medios de comunicación del movimiento palestino de la Jihad Islámica, Tariq Salmi.
Salmi señaló que "estos crímenes y este terrorismo que tiene como objetivo a los jerosolimitanos requieren trabajar para activar todas las medidas necesarias para protegerlos y rescatarlos, y fortalecer su firmeza frente a las políticas de limpieza étnica, y todos los delitos cometidos por la ocupación terrorista en su contra , agregó.
Los jóvenes palestinos se enfrentaron a las fuerzas de ocupación cuando irrumpieron en la localidad de Silwan, dispararon intensamente fuegos artificiales y atacaron un vehículo de aguas residuales utilizado para dispersar a los manifestantes.
Otros jóvenes prendieron fuego a una columna donde se encontraban colocadas cámaras de vigilancia de la ocupación dentro de la localidad de Silwan, al sur de la mezquita de Al Aqsa.
En el mismo contexto, las fuerzas de ocupación demolieron, la semana pasada, 11 viviendas en la localidad de Hamsa, en el valle del Jordán, en Cisjordania, y el jueves pasado volaron la vivienda del prisionero Montaser al-Shalabi, autor de la operación del puesto de control de Za'atara en la ciudad de Turmusaya, al norte de Ramallah en Cisjordania.
Las fuerzas de ocupación demolieron una institución comercial en el barrio de Al-Bustan en la localidad de Silwan, en la Jerusalén ocupada, además de demoler varias casas palestinas antes de retirarse de la localidad el 29 de junio.
Fuente: Al Mayadeen