En la noche del lunes 17, el presidente Iván Duque realizó una comparecencia televisiva para fijar la posición de su gobierno sobre la situación que se vive en Colombia y las salidas a la misma.
Previamente el gobierno había recibido la exigencia del Comité Nacional de Paro del otorgamiento de plenas garantías al ejercicio del derecho a las protestas, como requisito para entrar a negociaciones. Organismos internacionales de derechos humanos, partidos políticos y grupos parlamentarios de diversos países también han hecho solicitudes al gobierno para que cese la violenta respuesta contra las protestas. Grandes manifestaciones de solidaridad con el Paro Nacional y de condena al gobierno se vienen produciendo en todos los rincones del mundo.
En su intervención Iván Duque señaló en forma absolutamente cínica que “En Colombia existen plenas garantías para el ejercicio de las protestas y permitir sus desarrollos”, señalando que los bloqueos en las vías y carreteras son resultado de un “interés criminal para afectar a la economía”. Duque informó que ha dado “instrucciones a todos los niveles de fuerza pública para desplegar en los territorios su máxima capacidad operacional para desbloquear el país y ha llamado a todo el pueblo colombiano a respaldar plenamente a la Fuerza Pública.
No hizo Iván Duque en su intervención ninguna alusión al casi centenar de personas asesinadas por la policía en el marco de las protestas del paro, ni a las violaciones y abusos sexuales, ni a los miles de heridos como producto de la barbarie y brutalidad policial.
El llamado de Duque es a la guerra total contra el pueblo, a despejar a sangre y fuego las vías y las carreteras y aplastar al precio que sea la protesta popular, para las que no hay garantías y el mundo lo sabe.
Previamente el senador y aspirante presidencial Gustavo Petro había llamado en forma especial a las y los jóvenes de los barrios populares a pasar de los bloqueos a las manifestaciones multitudinarias para forzar al gobierno a las negociaciones multilaterales, señalando que mantener los bloqueos y las barricadas serviría de pretexto al gobierno para sus actos de violencia, caos y terror. Ayer el vandalismo policial se centró en el industrial municipio de Yumbo, en el departamento del Valle, con saldo de por lo menos tres muertos y decenas de heridos. En muchas ciudades se producen allanamientos y detenciones arbitrarias, especialmente de jóvenes activistas y líderes sociales.
Por su parte el Comando Nacional de Paro ha rechazado las negativas respuestas del gobierno a sus exigencias, señalando que quien está por fuera de la ley es el mismo gobierno y ha reafirmado la convocatoria a grandes manifestaciones de protesta en todo el país para este miércoles 19 de mayo.
Fuente: PaCoCol