El diario británico The Sunday Telegraph, citando una fuente familiarizada con el asunto, ha revelado este domingo que el militar en cuestión, que formaba parte de la Inteligencia australiana, llevaba consigo un disco duro sobre las acciones de las fuerzas de este país en Afganistán, cuando le hallaron sin vida en diciembre de 2020 en el estacionamiento de un cuartel del Ejército.

Según el reporte, pretendía supuestamente divulgar la información a la que tenía acceso, después de que las autoridades de las Fuerzas de Defensa australianas presentaran un informe especial, de 465 páginas, en el que se indicaba que los integrantes del Grupo de Trabajo de Operaciones Especiales de Australia ejecutaron ilegalmente a 39 afganos durante los años 2005 y 2016.

A juicio de la fuente del medio británico, este reporte era incorrecto y los datos del soldado muerto podrían presentar la verdadera cara de lo que ocurrió en Afganistán, además de que “cambiarían mucho la postura pública y la opinión sobre lo que pasó” en el país asiático.

En 2001, más de 26 000 uniformados australianos, junto a las fuerzas estadounidenses y otros aliados, invadieron Afganistán, so pretexto de erradicar el terrorismo y establecer la seguridad en dicha nación.

Sin embargo, la inseguridad sigue reinando en el territorio afgano, pese a los 19 años de presencia de las tropas extranjeras. Es más, han surgido cada vez más informes acerca de los homicidios ilegales de civiles desarmados en Afganistán por parte de las tropas estadounidenses y australianas, entre otras.

Fuente: Hispantv