Mediante una carta enviada el lunes al secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, los congresistas expresaron su rotundo repudio al plan israelí para anexionarse partes de la Cisjordania ocupada, mientras exigían a la Casa Blanca que “presione” al régimen de Tel Aviv para detener esta medida arbitraria.
“En el caso de que Israel materialice su plan de anexión (…), nosotros continuaremos trabajando en pro del no reconocimiento de este plan y presionaremos para detener la ayuda militar de EE.UU. a Israel, valorada en más de 3,8 mil millones de dólares”, asevera la nota.
La misiva advierte, asimismo, de las peligrosas consecuencias del plan expansionista del régimen de Israel, que amenaza la paz y la seguridad de la región, poniendo en peligro, además, la posición de Washington en la zona de Asia Occidental.
La carta fue firmada por varios congresistas demócratas de la Cámara de Representantes (Cámara Baja del Congreso), entre los que se incluían Alexandria Ocasio-Cortez (Nueva York), Rashida Tlaib (Michigan), Pramila Jayapal (Washington) y Betty McCollum (Minesota).
Según han informado medios locales, otros legisladores también rubricaron el texto y entre los mismos destaca el senador por el estado de Vermont y antiguo precandidato demócrata a la Presidencia de EE.UU., Bernie Sanders.
La Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, siempre ha patrocinado, ayudado y facilitado los planes ilegales del régimen sionista en la Palestina ocupada, a pesar del repudio y rechazo contundente de la comunidad internacional.
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De hecho, el plan expansionista para Cisjordania se realiza bajo el llamado ‘acuerdo del siglo’ que presentó EE.UU. en enero. Entre otras medidas ilegales, el plan deja en manos de Israel el cotizado valle del Jordán y otorga a los palestinos una autonomía limitada dentro de una patria discontinua. Olvida, además, la problemática de millones de refugiados palestinos deseosos de retornar a sus tierras.