Fuentes yemeníes informaron el miércoles de los nuevos ataques, diciendo que tenían como objetivo la capital, Saná, y la provincia central de Ibb, entre otros lugares.
En la capital, se reportaron ocho nuevos ataques aéreos, aunque aún no se han confirmado víctimas. Se cree que los ataques impactaron infraestructuras críticas, perturbando aún más la vida civil en la ciudad.
En Ibb, se informó de tres ataques aéreos que tuvieron como objetivo la red de comunicaciones en lo que parecía un intento de desmantelar instalaciones civiles y cortar líneas de coordinación interna.
Tragedia en Al Hudaydah: entre las víctimas mortales hay niños
Sin embargo, el saldo más devastador se registró en la provincia occidental de Al-Hudaydah, donde se confirmó la muerte de seis civiles, entre ellos dos niños y una mujer. Al menos otras 16 personas resultaron heridas, muchas de ellas de gravedad.
Mientras tanto, los equipos de rescate siguen trabajando para retirar los escombros y buscar supervivientes tras los bombardeos.
Los grupos de derechos humanos dicen que el ataque a Al-Hudaydah, una ciudad densamente poblada que también sirve como principal puerto y fuente de vida humanitaria de Yemen, ha suscitado serias preocupaciones por la continua erosión de la seguridad civil y el flujo de ayuda esencial al país.
Los ataques elevaron el total de casos de agresión aérea estadounidense contra el ya empobrecido país a unos 50 en las últimas 24 horas.
A pesar de la negativa del propio Estados Unidos a señalar el propósito principal de la escalada contra Yemen que comenzó el mes pasado, la agresión es vista ampliamente como una continuación de la política regional más amplia de Washington en apoyo al régimen israelí y su brutal guerra de genocidio en la asediada Franja de Gaza.
En solidaridad con Gaza, las Fuerzas Armadas de Yemen han estado atacando objetivos israelíes y vinculados a Israel, así como activos militares estadounidenses en el Mar Rojo y más allá, en numerosas ocasiones.
Los funcionarios yemeníes han descrito las operaciones como una respuesta legítima al genocidio, al apoyo de Estados Unidos al mismo y a los ataques estadounidenses contra el propio Yemen.
A pesar de su enorme potencia de fuego, el Pentágono no ha logrado impedir las operaciones con misiles y aviones no tripulados en Yemen.
El domingo, la CNN describió la campaña de agresión estadounidense como un esfuerzo astronómicamente costoso que no había logrado disuadir a Yemen, que incluso había amenazado con ampliar el alcance de sus ataques de represalia.
Fuenete: PressTv