Siria era un miembro clave del llamado “Eje de la Resistencia”, una coalición de actores que se oponen a Israel y sus acciones. ¿Qué significará la salida de Assad para la resistencia contra Israel, especialmente considerando la abierta amistad de Jolani con Tel Aviv? Dado su nuevo gobierno, ¿qué les espera ahora al Líbano y a Hezbolá? ¿Y qué pasará con Irak y Yemen?
Para hablar de todo esto y más, nos visita Ghadi Francis, una invitada habitual. Ghadi es una escritora, periodista y corresponsal de guerra que ha cubierto la situación en Siria y Palestina con gran detalle. Nacida en el Líbano, es autora del libro “Mi pluma y mi dolor: Cien días en Siria” (2012).
El mes pasado, Ghadi se unió a The MintCast para hablar sobre las consecuencias del ataque de Israel a sus vecinos. Durante la entrevista, puso su mirada en la administración de Erdoğan en Ankara, y afirmó que “Turquía es tan expansionista como Israel, ¡y eso no es nada nuevo!”.
Vivíamos en una nación llamada “Gran Siria”, que estuvo ocupada por los otomanos durante unos 300 años. Se extendía desde el Líbano hasta Siria e Irak. Nínive, Alepo, todo eso estaba ocupado por los otomanos. Éramos parte del Imperio Otomano. Estábamos gobernados por ellos en una dictadura y en una ocupación”.
La derrota del Imperio Otomano al final de la Primera Guerra Mundial no puso fin a esta ocupación, afirmó. “Si miramos el mapa actual, el sur de Turquía no es otra cosa que el norte de Siria ocupada. Gaziantep, Diyarbakir, Mardin… Son zonas que históricamente pertenecen a Siria, no a Turquía”, añadió.
A pesar del derrocamiento de Assad, Francis está convencida de que la resistencia a la ocupación israelí está lejos de haber terminado. Hoy, dice, una de las muestras de solidaridad más firmes y comprometidas con Palestina proviene de Yemen. “Dios bendiga a Yemen y al pueblo yemení”, dijo, señalando que Yemen es la nación más empobrecida de la región, pero también la más valiente.
Yemen ha enfrentado años de bombardeos liderados por Arabia Saudita, así como meses de ataques estadounidenses, y aun así ha resistido. “¿Qué pueden hacer los estadounidenses?”, preguntó Francisco. “Yemen es una nación enorme. No tienen nada que perder y tienen todo por ganar”, agregó.
Francis regresó recientemente de un viaje a Irak, donde quedó impresionada por el renacimiento del país después de décadas de ocupación. A diferencia de Yemen, evaluó, Irak no está en condiciones de enfrentarse al poderío de Estados Unidos o Israel. “Si los iraquíes continúan resistiendo por su cuenta y son atacados por los israelíes, nadie los va a proteger”, dijo. “Por lo tanto, si se abstienen por un tiempo de participar en operaciones de resistencia activa y, en cambio, son una comunidad buena y fuerte… esto en sí mismo es un gran logro”.
Fuente: MintPressNews