La medida, anunciada por el Gobierno colombiano en un decreto con fecha del 14 de agosto último, entrará en vigencia a partir del día 22 del mismo mes, y se corresponde con la política de defensa de los derechos humanos recogida por la Constitución del país sudamericano.
“El artículo 95 de la Constitución Política establece que la calidad de colombiano implica (...) obrar conforme al principio de solidaridad social, respondiendo con acciones humanitarias ante situaciones que pongan en peligro la vida o la salud de las personas”, señala la disposición adoptada por el Ejecutivo de Gustavo Petro.
El decreto menciona de forma explícita las medidas provisionales dictaminadas por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que reconocen “la gravedad de la situación humanitaria que se ha desencadenado en Palestina con ocasión de la operación militar llevada a cabo por Israel después del 7 de octubre de 2023”.
Por ello, a partir del día 22 de agosto, quedarán prohibidas “las exportaciones al Estado de Israel de las hullas térmicas (carbón)”, excepción hecha de las ya aprobadas antes de la entrada en vigor del decreto, firmado por el ministro de Asuntos Exteriores, Luis Gilberto Murillo, y el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla González.
El presidente colombiano anunció en junio la decisión de su Gobierno de prohibir las exportaciones de carbón con destino a la entidad sionista, hasta que el régimen de Tel Aviv detenga el genocidio contra Palestina.
Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el carbón es el principal producto de exportación de Colombia a Israel.
Entre enero y agosto de 2023, el país andino exportó a Israel productos por un monto de 375 millones de dólares. De ese total, el 93 por ciento correspondió a carbón (hullas térmicas y briquetas), un producto estratégico para la fabricación de armas, la movilización de tropas y la fabricación de provisiones para operaciones de uso militar, precisan las autoridades colombianas.
Desde el inicio de la criminal campaña militar del ejército israelí en Gaza, en octubre del pasado año, el Gobierno de Colombia ha llamado en reiteradas ocasiones a la adopción de un alto el fuego inmediato, y ha exigido que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, responda ante la justicia internacional por crímenes de guerra en el sitiado enclave palestino.
En esa línea, el pasado 1 de mayo el presidente colombiano anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con la entidad sionista por el genocidio en curso contra la población palestina en la Franja de Gaza.