De acuerdo con el representante permanente de Palestina ante la Liga Árabe, Mohannad Aklouk, el cónclave abordará además la expansión de los asentamientos de la entidad sionista en la Cisjordania ocupada.
“La reunión se llevará a cabo a nivel de delegados permanentes esta semana para discutir cómo enfrentar los crímenes israelíes de genocidio y expansión colonial en Cisjordania”, afirmó Aklouk el domingo en una entrevista con la agencia oficial de noticias palestina WAFA.
Sin embargo, el organismo aún no ha confirmado la reunión.
A inicios de junio, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, pidió un rápido fin del actual desastre humanitario en la Franja de Gaza.
“Es imperativo poner fin al desastre humanitario provocado por la agresión de Israel en Gaza. Las fuerzas de ocupación deben retirarse completamente de la Franja de Gaza, los refugiados deben regresar a sus hogares y debe iniciarse el proceso de reconstrucción”, afirmó.
Israel desató una guerra genocida contra Gaza como represalia por el fracaso sufrido durante la operación Tormenta de Al-Aqsa, ejecutada el 7 de octubre pasado por el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) contra objetivos israelíes en los territorios ocupados, en respuesta a décadas de crímenes contra el pueblo palestino.
Los indiscriminados bombardeos y la ofensiva terrestre de las fuerzas de ocupación contra el sitiado enclave palestino han dejado un saldo fatal de al menos 37 877 muertos y cerca de 87 000 heridos, mientras que unas 10 000 personas se encuentran desaparecidas bajo los escombros, de acuerdo con estimaciones de las autoridades gazatíes.
Desde el inicio de la operación militar a gran escala contra Gaza, las víctimas también han ido en aumento en Cisjordania como resultado de las recurrentes incursiones del ejército israelí en pueblos y ciudades de los territorios ocupados.
Alrededor de 550 palestinos han sido asesinados en Cisjordania por las fuerzas ocupantes o por colonos sionistas, y más de 9000 han sido detenidos.
En este contexto, el gabinete de seguridad israelí autorizó el jueves cinco nuevos asentamientos ilegales en la Cisjordania ocupada, como represalia por el reconocimiento del Estado palestino en el mundo.
El extremista ministro israelí de finanzas, Bezalel Smotrich, aplaudió el viernes su plan para expandir los asentamientos, al destacarlo como una opción que “protege” a la entidad sionista y “transmite el mensaje claro” de que Israel “nunca” permitirá el establecimiento de un Estado palestino.
Los cinco enclaves coloniales son Evyatar, Givat Assaf, Sde Efraim, Heletz y Adorayim.
El derecho internacional considera tanto a Cisjordania como a Al-Quds (Jerusalén) territorios ocupados, por lo cual califica como ilegal toda actividad israelí de construcción de asentamientos allí.