En un informe publicado este miércoles, la oenegé Save the Children dio a conocer que a casi 400 niños en Gaza, al menos dos niños por día, se les negaron permisos para viajar a Cisjordania y recibir tratamiento crítico en los primeros seis meses de 2023.
La organización no gubernamental, en el informe titulado “No puedo correr, jugar ni recibir tratamiento”, explica que “cerca de 100 solicitudes de niños presentadas a las autoridades israelíes fueron denegadas o quedaron sin respuesta solo en el mes de mayo”, durante la agresión israelí a la sitiada la Franja de Gaza.
Precisa que, durante el mismo mes, al menos siete niños se encontraban entre los 33 palestinos muertos en el ataque de Israel a Gaza entre el 9 y el 13 de mayo de 2023. El año pasado, tres niños murieron mientras sus solicitudes de permisos de salida de Gaza eran denegadas o seguían bajo revisión, recuerda el documento.
“No hay tratamientos de quimioterapia ni radiología disponibles debido a las restricciones del régimen israelí a la entrada de equipos médicos y medicamentos a Gaza”, denuncia Save the Children.
Al comentar sobre el informe, Jason Lee, director nacional de Save the Children en el territorio palestino ocupado, dijo, en un comunicado, que “negar atención médica a los niños es inhumano y una violación de sus derechos, y separar a los niños de sus padres durante el tratamiento puede hacer que a esos niños les resulte aún más difícil afrontar la situación”.
El régimen israelí se niega a permitir la entrada de equipos médicos y hospitalarios, así como repuestos para dispositivos que se requieren para tratar a miles de pacientes en Gaza, de manera que el sector de la salud corre un grave peligro que podría acabar en un desastre humanitario. Cientos de los pacientes palestinos ya han perdido la vida bajo el actual bloqueo israelí.
Israel ocupó Gaza y el cercano territorio palestino de Cisjordania durante una guerra fuertemente respaldada por Occidente en 1967. El régimen retiró sus fuerzas de Gaza en 2005, pero ha mantenido el territorio bajo un asedio terrestre, aéreo y naval total que lo ha convertido en la prisión al aire libre más grande del mundo.
Según las Naciones Unidas, como resultado del asedio, alrededor de 2,1 millones de palestinos en la franja sitiada están encerrados, y la gran mayoría de ellos no pueden acceder al resto de los territorios palestinos ocupados y al mundo exterior.