La transferencia planificada, que forma parte de un paquete de ayuda estadounidense de mil millones de dólares para Kiev presentado el miércoles, también ha planteado dudas sobre los posibles efectos que el uranio empobrecido podría tener sobre los civiles en Ucrania.
La Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, defendió su decisión y un portavoz de la Casa Blanca dijo a los periodistas que la munición no representa “ninguna amenaza radiactiva”. “Las municiones de uranio empobrecido no plantean ninguna amenaza cancerígena o radiactiva”, dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby.
Pero Rusia ha arremetido contra Estados Unidos, y la embajada rusa en Washington denunció la medida como “un indicador de inhumanidad” que causará “efectos indiscriminados”.
Estados Unidos anunció el miércoles que planea enviar municiones perforantes con uranio empobrecido a Ucrania. Los proyectiles de 120 mm se utilizarán para armar los 31 tanques M1A1 Abrams que Estados Unidos planea entregar a Kiev en la segunda mitad del año.
Los proyectiles fueron desarrollados por Estados Unidos durante la Guerra Fría para destruir los tanques soviéticos, incluidos los mismos tanques T-72 que ahora enfrenta Ucrania en su contraofensiva.
El uranio empobrecido es un subproducto del proceso de creación del uranio enriquecido, que se utiliza en combustible y armas nucleares.
Las balas conservan algunas propiedades radiactivas, pero no pueden generar una reacción nuclear como lo haría un arma nuclear, dijo el experto nuclear e investigador de políticas de RAND, Edward Geist.
Aunque es mucho menos potente que el uranio enriquecido e incapaz de generar una reacción nuclear, el uranio empobrecido es extremadamente denso –más denso que el plomo–, cualidad que lo hace muy atractivo como proyectil.
“Es tan denso y tiene tanto impulso que sigue atravesando la armadura y la calienta tanto que se prende fuego”, dijo Geist.
Según el Museo de Radiación y Radioactividad de las Universidades Asociadas de Oak Ridge, en la ciudad estadounidense de Tennessee, “cuando un penetrador de uranio empobrecido impacta un objetivo, la temperatura de su superficie aumenta dramáticamente”.
Y cuando ese uranio empobrecido penetra un objetivo, “los fragmentos más grandes tienden a masticar lo que haya dentro, mientras que la piroforicidad del uranio aumenta la probabilidad de que el combustible y/o las municiones del vehículo exploten”.
Estados Unidos, Reino Unido, Rusia, China, Francia y Pakistán producen armas de uranio empobrecido, que no están clasificadas como armas nucleares, según la Coalición Internacional para la Prohibición de las Armas de Uranio.
Los efectos del uranio empobrecido en la salud han sido objeto de debate. Si bien algunos científicos relacionan las municiones con uranio empobrecido con muchas enfermedades, incluido el cáncer, otros estudios descartan tales riesgos.
El problema surgió en la última década después de que algunos investigadores culparan al uranio empobrecido por los aumentos en los defectos de nacimiento cerca de las bases militares estadounidenses y los campos de batalla en Irak.
El ejército estadounidense, que dice haber utilizado uranio empobrecido desde 1991, cuando participó en la primera Guerra del Golfo Pérsico, ha descrito la munición como sólo “ligeramente” radiactiva. Dice que el uranio empobrecido sólo plantea riesgos para la salud a largo plazo si se inhala o ingiere en grandes cantidades.
El organismo de control nuclear de las Naciones Unidas, la OIEA, dice que el principal riesgo para la salud del uranio empobrecido es su toxicidad química, no su radiactividad.
En marzo, Estados Unidos desestimó las protestas rusas después de que el Reino Unido dijera que enviaría municiones con uranio empobrecido a Ucrania.
En abril, un funcionario del gobierno del Reino Unido confirmó que las fuerzas ucranianas ya poseen municiones de uranio empobrecido.
El miércoles, el diario Politico citó a un funcionario estadounidense no identificado diciendo que Rusia simplemente está preocupada por sus tanques en Ucrania.
“Lo que realmente está sucediendo es que Rusia simplemente no quiere ver a Ucrania con tanques y rondas de tanques más efectivas que podrían ser letales contra los tanques rusos”, dijo el funcionario. “Si Rusia tiene algún problema con eso, puede retirar sus tanques de Ucrania”.
Rusia ha condenado enérgicamente la transferencia de municiones con uranio empobrecido a Ucrania. “La decisión de la Administración estadounidense de enviar proyectiles de uranio empobrecido a [Kiev] es una clara señal de inhumanidad”, dijo el miércoles la embajada rusa en Washington en un comunicado.
La periodista Yulia Shapovalova en declaraciones a Al Jazeera desde Moscú afirmó que Rusia ha dicho que está “totalmente en desacuerdo” con la postura de Estados Unidos de que los proyectiles no representan una amenaza radiactiva. “Rusia lo ve como una nueva ronda de escalada”, informó Shapovalova.