Colombia es el país como mayor cantidad de desplazados internos a causa de la violencia. Así lo revela un informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). El informe señala que 7,7 millones de personas debieron dejar sus hogares de manera forzada.
Según el informe, Colombia quedó por encima de países como Siria –que lleva ocho años en guerra contra fuerzas terroristas que ocuparon parte de su territorio–, Afganistán, Irák, Sudán del Sur y Somalia.
La investigación da cuenta de que “el año 2017 fue el primer año de implementación del Acuerdo de Paz entre el Gobierno de Colombia y el exgrupo insurgente de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC); durante este tiempo, si bien los frutos del cese de la confrontación armada han sido evidentes, también lo han sido los desafíos y vacíos de protección que siguen representando algunas regiones del país”.
n diálogo con Contexto, Jorge Kreyness, analista de política internacional, aseguró que “en Colombia, la base de la violencia se encuentra en la concentración de la tierra en pocas manos. Ese es el principal problema histórico de Colombia. Incluso, la primera guerrilla, las FARC-EP, fundada por Marulanda, se inició como una autodefensa campesina frente a la violencia generada por los grandes terratenientes en la disputa por la tierra”.
“La fusión entre los grandes terratenientes, el paramilitarismo y el negocio del narcotráfico generó el desplazamiento de muchísimas familias campesinas, que han debido migrar a otros territorios en una verdadera crisis humanitaria”, remarcó. “Colombia no sólo tiene la mayor cantidad de desplazados, sino que además es uno de los países de América Latina con mayor desigualdad”, sostuvo el especialista.
Kreyness recordó que “hay puntos del Acuerdo de Paz firmado entre las FARC-EP y el gobierno de Santos que plantean este problemas y posibles soluciones. Pero esos puntos no se han cumplido por parte del Estado y la próxima asunción de Iván Duque como presidente de Colombia no es un dato alentador. Duque es un representante de Álvaro Uribe Vélez, y la verdad es que el enfoque es pesimista”.