"Es imperativo frenar la impunidad que caracteriza los homicidios de periodistas en México", puntualizó Jarab en un comunicado difundido por su oficina.

El crimen ejecutado el 19 de diciembre por dos hombres armados, ocurrió durante una celebración navideña en la escuela del hijo del periodista, "en presencia de niños, niñas, madres, padres de familia y personal educativo", afirmó el representante de alto comisionado de la ONU Zeid Ra'ad Al Hussein.

Jarab expresó que "este asesinato confirma un año terrible para la libertad de expresión en México y, en particular, profundamente trágico para el estado de Veracruz".

El brutal homicidio que conmocionó al país elevó a 12 el número de periodistas asesinados este año en México, relacionados con su trabajo de investigar y difundir casos de corrupción y crimen organizado.

El periodista se había acogido a un programa para prevenir ataques en contra de los comunicadores en Veracruz, en marcha desde 2015, "a pesar del cual las agresiones y los asesinatos continúan", denunció la oficina de la ONU encargada de vigilar ese mecanismo de protección.

Pérez Aguilando, de 35 años, colaboró con varios medios de la región de las costas del Golfo de México, y trabajaba para la alcaldía de Acayucan en tareas de comunicación social.

La oficina de la ONU confirmó que "debido a su labor periodística, Pérez habría recibido agresiones en 2012 y 2014".

Jarab recordó que los relatores para la libertad de expresión de la ONU, David Kaye, y de la Comisión Interamericana de DDHH (CIDH), Edison Lanza, visitaron Veracruz en el marco de una gira de trabajo por México, realizada durante una semana, hasta el 4 de diciembre pasado, dada la gravedad de la situación de los periodistas en la región.

En sus observaciones preliminares —señaló la ONU-DH-, los relatores confirmaron que "la existencia de estas alertas no ha desalentado los subsiguientes asesinatos de periodistas".

Los relatores alertaron sobre la naturaleza específica de los riesgos, en el contexto de "la crisis de seguridad en zonas de conflicto, los periodos electorales y las manifestaciones públicas".

La ONU-DH hizo, finalmente, "un respetuoso llamado a las autoridades estatales y federales competentes para que realicen una investigación eficaz sin descartar una línea de investigación que tome en cuenta la labor periodística" de la víctima.

El país latinoamericano siguió siendo en 2017 el "país más mortífero" para los periodistas en América latina y uno de los cinco más peligrosos del mundo, junto con Siria, Afganistán, Irak y Filipinas, dijo en un informe de Reporteros Sin Fronteras (RSF) publicado el martes, horas antes del asesinato de Pérez.

De los 65 homicidios de periodistas en el mundo, la sexta parte ocurrió en México.

Un total de 38 periodistas fueron asesinados desde diciembre de 2012 en el país, cuando comenzó el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto. 

Fuente: Sputnik