La lucha contra la corrupción en Arabia Saudí se ha desatado bruscamente. Las detenciones masivas de altos cargos y figuras de autoridad permiten a los analistas hablar sobre los cambios significativos en la vida del reino.
El 5 de octubre la comisión anticorrupción de Arabia Saudí ordenó detener a unas 40 personas influyentes entre las cuales figuraban los miembros de la familia real, los ministros y los empresarios militares.
El experto militar saudí Abdalá Ganim Qahtani comunicó a Sputnik que las órdenes reales relacionadas con la corrupción "forman parte de un plan de desarrollo integral y de reformas del reino que afectarán a todas las esferas".
Qahtani afirmó que la nueva estrategia supone la participación de los líderes jóvenes en la vida política del país.
"Lo más importante y destacable es que el rey ordenó establecer un Comité Supremo contra la corrupción dirigido por el príncipe heredero. Esto prueba la seriedad de las intenciones del rey y de su Gobierno en cuestión de revelación e investigación de los delitos relacionados con la corrupción de todo tipo", añadió el experto.
Además, la lucha contra la corrupción muestra a la población que todos los ciudadanos saudíes son iguales ante la ley, según subrayó Qahtani.
El miembro de la oposición saudí y el secretario general del partido Renovación Islámica, Mohamed Masari indicó en su entrevista para Sputnik que las detenciones recién efectuadas resultaron ser sorprendentes para toda la población del país árabe.
"Anteriormente parecía que los miembros de la familia real así como sus socios tenían un estatuto especial de inviolabilidad", afirmó el político.
Al mismo tiempo, Masari explicó a Sputnik, que la iniciativa prometedora de las autoridades saudíes tiene su lado oscuro. El experto opina que la lucha contra la corrupción sirve para que el príncipe heredero pueda eliminar a sus posibles rivales políticos.
Además, el experto indicó que la campaña comenzó en un momento equivocado, ya que el país igual que toda la región se encuentra en una situación complicada. Por lo tanto, "este noble objetivo no se logrará, en cambio, el efecto podrá ser el contrario".
Las detenciones masivas en Arabia Saudí plantean una pregunta sobre el destino del dinero congelado o confiscado. De momento se trata de 800.000 millones de dólares pertenecientes a más de 60 personas. ¿Adónde irán esas enormes fortunas?
Si las acusaciones de corrupción resultan probadas, el destino de las compañías y la propiedad implicadas será decidido por el fiscal general de Arabia Saudí.
"Si se comprueba que los terrenos o la propiedad fueron sustraídos al Estado, todo volverá a estar a su disposición (…) Las detenciones efectuadas no eran ocasionales, sino que concluyeron las investigaciones y los interrogatorios, y el rey Salmán se limitó a poner los puntos sobre las íes", comentó a Sputnik el jefe del Centro de Consultas Económicas, Muhamed Shams.
Asimismo, el fiscal general de Arabia Saudí afirma que la investigación de los delitos de corrupción anterior a las detenciones masivas duró un mes.
El interlocutor de Sputnik añade que el príncipe heredero saudí mencionaba dicha investigación varias veces y prometía combatir la corrupción por muy alta que fuera la condición social de los involucrados.
Según indica The Wall Street Journal, la parte mayor de los activos se encuentra en el extranjero, lo que va a obstaculizar su regreso al país. Sin embargo, el medio apunta que ya una parte de dicho dinero podría mejorar la situación financiera de Arabia Saudí, afectada por el largo período de los bajos precios de crudo en el mercado mundial.
El periódico estadounidense recuerda que la escasez de los ingresos petroleros ya obligó al Gobierno del país a acudir a los mercados de préstamos y recurrir a los fondos de reserva nacionales.
Fuente: Sputnik